En el blog de Gin Tonic Pack nos gusta mimar a nuestros lectores, por eso hoy hemos traído una receta fácil de preparar que resulta irresistible a la vista y, por su puesto, al paladar.
Se trata de unas extraordinarias trufas de chocolate blanco y ginebra que no dejarán a nadie indiferente, el sabor de la ginebra y la ralladura de limón se entremezclan con el sabor del chocolate blanco, resultando un verdadero manjar para los amantes de la ginebra y del Gin Tonic.
Dulces y untuosas por dentro, ásperas y un poco amargas por fuera. Magnificas para concluir una velada inolvidable.
A la base de ganache (chocolate y nata) puede agregarse casi cualquier cosa. Invito a nuestros lectores a que experimenten añadiendo a la mezcla frutos secos tostados y troceados, como pistachos o almendras. También pueden cubrirse con chocolate amargo (o blanco) derretido, coco rallado, avellanas y por qué no? un par de cucharadas más de ginebra en el ganache.
Yo he utilizado una ginebra Gordon´s pero se puede utilizar cualquier otra que tengas a mano. Y si no tienes ninguna, puedes escoger cualquiera de las ofrecidas en la tienda de Gin Tonic Pack
Trufas de Gin Tonic
100 g de chocolate blanco troceado.
70g de nata (crema de leche).
20 g de mantequilla sin sal, fundida.
2 cucharadas de ginebra.
Galletas Maria (un paquetito de 4 galletas) trituradas gruesamente.
Ralladura y el jugo de medio limón (yo usé 2 cucharadas de jugo).
Cacao en polvo para cubrir la trufas.
Con la ayuda de una paleta de madera o de goma, mezclar el chocolate con la nata. Incorporar la mantequilla fundida y remover hasta disolver por completo el chocolate.
Agregar la ginebra, las galletas trituradas, el jugo y la ralladura de limón removiendo hasta integrar bien todos los ingredientes.
Colocar la mezcla en un recipiente hermético. Tapar y refrigerar al menos tres horas o incluso durante toda la noche.
Para formar las trufas, tomar una cucharadita de la mezcla y formar bolas con las manos ligeramente espolvoreadas con cacao en polvo.
Tamizar el cacao en una bandeja y hacer rodar las trufas sobre el cacao hasta cubrirlas por completo.
Colocar las trufas en una bandeja forrada con papel de horno y refrigerar hasta el momento de servir (al menos una hora)
Se pueden guardar en el refrigerador en un recipiente hermético durante 3 días o congelar hasta por un mes. Descongelar en el refrigerador durante la noche antes de servir.
Alcanza para 12-14 trufas
