Puede que pienses que este no es el mejor momento para escribir esta receta de macarons de Gin Tonic, una especie de sandwich dulce de procedencia francesa. En nuestras despensas todavía hay restos de turrones y demás dulces navideños y aprovechamos cualquier ocasión para ofrecérselos a nuestros invitados.
Pero precisamente por eso, porque ya va siendo hora de volver a la normalidad, tenemos que empezar a pensar en otro tipo de postres. Los macarons de Gin Tonic son un bocado tan delicado como delicioso y colorido.
Su elaboración es un poco laboriosa, por eso he hecho un mix con las recetas que me han parecido más sencillas. La de las tapas para nuestros macarons de Gin Tonic la he sacado del blog todoconazucar. Y la del relleno de natilla de Gin Tonic, de requetedulces.
Ingredientes para los macarons de Gin Tonic
¿Nos lavamos las manos y nos ponemos en marcha? Como siempre, empezamos por comprobar que tenemos todos los ingredientes. Para las tapas (las medidas son para 72, es decir, para 36 pastelitos) necesitaremos:
- Almendra en polvo (110 gramos)
- Azúcar glas (225 gramos)
- 4 claras de huevo
- Azúcar (50 gramos)
- Colorante (opcional)
Por su parte, el relleno de natilla de Gin Tonic lleva los siguientes ingredientes:
- 75 ml de nata
- 3 yemas de huevo
- Maizena (media cucharada)
- Azúcar (3 cucharadas)
- Pasta de Gin Tonic (una cucharadita)
Elaboración de los macarons de Gin Tonic
¿Has comprobado que lo tienes todo? Pues el siguiente paso es ponerse con la elaboración. Lo primero es hacer las tapas. Para ello lo mejor es utilizar una plantilla y colocarla en la bandeja del horno para que los macarons de Gin Tonic no se muevan.
Los siguientes pasos debes respetarlos al máximo:
1. Mezclamos la almendra con el azúcar glas previamente tamizada.
2. En un bol, batimos las claras hasta que queden como una espuma. Cuando veamos que nos queda poco para que estén montadas, añadimos el azúcar normal y el colorante (en caso de que queramos utilizarlo).
3. Vertemos sobre el merengue la pasta de almendras que ya teníamos hecha y mezclamos con movimientos envolventes.
4. Metemos esta masa en una manga pastelera (la boquilla ideal es la de 6 mm), la colocamos de forma vertical y vamos formando pequeños montoncitos sobre la plantilla o el papel de hornear.
5. Golpeamos la parte inferior de la bandeja de horno para que la masa se asiente y dejamos reposar hasta que se haya secado.
6. Encendemos el horno a 150° en la posición de calor por arriba y abajo (sin ventilador) y metemos los pastelitos durante unos 15 minutos.
7. Cuando estén listos, sacamos y dejamos enfriar.
Ha llegado la hora de hacer el relleno de ginebra. Para ello ponemos a calentar la nata, el azúcar y las yemas. Removemos hasta que esté caliente. En ese momento sacamos un par de cucharadas a otro recipiente y usamos el líquido para disolver la maizena. En cuanto la mezcla que tenemos en el fuego comience a burbujear, es el momento de añadir la maizena disuelta. Seguimos removiendo hasta que espese. Entonces retiramos del fuego, echamos la pasta de Gin Tonic y removemos. Cuando haya enfriado, rellenamos los macarons de Gin Tonic.
¡Bon appetit!
