Ah, Escocia. No es difícil asociar aquel país con su bebida nacional por excelencia, el whisky. Pero tampoco es raro encontrar excelentes ginebras producidas en aquellas tierras: Hendrick’s, Blackwood’s, Old Raj, Edinburgh, Boë… Y también The Botanist, que lleva desde 2011 repartiendo por el mundo pequeñas dosis de las Highlands escocesas, y que ya tardaba en aparecer por aquí.
The Botanist se produce en la isla de Islay, una de las Hébridas, en la destilería Bruichladdich, donde el whisky es religión, pero donde se ve que también saben destilar ginebra conforme al patrón London Dry: 46 grados alcohólicos y destilación a baja presión en un viejo alambique rebautizado Ugly Betty por el maestro Jim McEwan para un resultado delicado, complejo y personalísimo. Lleva unas 17 horas sólo el proceso de destilado…